Declaración de arte

Esta colección de fotografías fue tomada en un pequeño pueblo dentro de las montañas de los Alpes del Ródano.  

Hubo un momento curioso una mañana de invierno cuando salí para ser golpeado por los puntos relucientes del hielo formado en cristales sobre la nieve.  Fue una vista gloriosa y me inspiró a mirar más de cerca con mi cámara.  Poco después de romper los carámbanos recién asentados, empaqué mis cosas y me dirigí al bosque.  Quería capturar la sensación de un paisaje escondido en un sueño.  Siento que los colores son tan ricos como los de la fruta que les da nombre.  Como en un sueño, desearía poder traerlos a la realidad para probarlos.

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